Aparece el invierno con los días más cortos. Los paisajes se adaptan al duro clima de los próximos meses. Los animales parecen desaparecer, los árboles pierden las hojas...y el frío se apodera del ambiente.

Las especies caducifolias, donde las hojas se tornan doradas en esta época del año, crean un paisaje sorprendente. Infinidad de aves inician su periplo migrador y los mamíferos acumulan grasas para el invierno con los frutos otoñales.

El verano aparece con sus días largos y soleados. Muchas animales ya han criado y las distintas especies botánicas muestran un aspecto radiante, junto a un paisaje adaptado a la nueva estación.

Llega la primavera y los campos despiertan del letargo invernal. Las distintas especies de animales entran en un ciclo de reproducción y la vegetación muestra un aspecto cambiante.